La Tierra tiene una capacidad limitada para regenerar cada año los bienes y servicios ecosistémicos que necesitamos para vivir (agua, suelo, regulación del clima, alimentos…)

Ahora gastamos en una navidad el “presupuesto ambiental” que gastaban nuestros abuelos hace 45 años: 1 Tierra

Entre compras, regalos, alimentación, desplazamientos y todo lo que hace “diferente” la navidad, usamos los mismos “recursos naturales” que necesitamos para vivir dos meses ahora y que se necesitaba para todo el año, cuatro décadas atrás.

Por supuesto, esto son medias, pero ¿querrías saber de dónde salen todos estos datos y cómo puedes calcular cuántos planetas necesitas para vivir?

Tres calculadoras sencillas de nuestra huella

Muchas veces nos preguntamos sobre el impacto de las decisiones que tomamos: ¿realmente tiene tanta importancia optar por dietas vegetarianas? ¿qué opción de transporte es mejor? ¿y la manera de comprar?

Aquí tres opciones para que respondiendo preguntas muy rápidas, puedas ver cuál es el impacto de nuestras decisiones:

FOOTPRINT CALCULATOR:

te contaré más, pero aquí tienes el enlace en español de esta calculadora tan visual y sencilla de usar: https://www.footprintcalculator.org/home/es

Después de algunas preguntas, os mostrará los resultados de dos formas:

– los recursos de “cuántas tierras” necesitas para vivir un año

– en qué día de este año agotarás los recursos que La Tierra tiene para ti (el llamado “día de rebasamiento” o “overshoot day”)

Y podéis ver muchísimas recomendaciones por sectores

UNIVERSIDAD DE ALCALÁ:

Una web con mucha información y claridad, sobre todo si lo que quieres es simplicidad e ir viendo cómo podría variar tu huella si cambiaras ciertos sectores https://www.huellaco2.org/tuhuella.php

App “Huella para la vida” (más enfocada a emisiones de CO2)

Te puedes descargar fácilmente la aplicación para el móvil “huella para la vida” o “footprint for life”.

Además de ser muy fácil de usar, introduce el concepto de “huella ética” que es la cantidad de CO2 que deberíamos emitir como máximo cada persona para que todos los habitantes del planeta gozaran de las mismas oportunidades. El número mágico es 1tonelada de CO2 por persona… En España la media supera las 5 toneladas de CO2 por persona y año.

Hay otras aplicaciones como Compensate, que te van recordando periódicamente las cosas que podrías hacer, pero que no me terminan de convencer.

¿Qué os ha salido? ¡Nos encantará escuchar vuestros resultados!

En este otro post tenéis algunas páginas con recomendaciones para ayudar a reducir nuestro impacto como terrícolas… Pero si tuviera que escoger algo muy concreto como consejo, sin duda diría:

  1. Preguntarnos ¿realmente es necesaria esta compra para mi felicidad? Mucha de las veces la respuesta es “no” y así ahorramos toda la huella de agua, energía, transporte y recursos que está dentro de lo que compramos (desde un pantalón vaquero a un tomate, todo necesita agua y energía para llegar hasta nuestras manos… y todo tiene un impacto)
  2. Si la respuesta es sí, lo necesito, entonces mirar bien de dónde viene (cuanto más cercano mejor) y preguntarnos cómo habrá sido producido (¿condiciones sociales? ¿demasiado envase innecesario? ¿el fabricante minimizó costes o pensó en minimizar las externalidades de su producción?)
  3. ¿Tengo una alternativa mejor de ese producto? En cuestión de comidas, en los mercados locales suele haber mejores alternativas (por cercanía, poco envasado y de temporada) que en los supermercados… pero igual, hay que preguntar! A veces hay productos (como los electrónicos) que la mejor alternativa es mirar páginas de segunda mano o refurbished … para el textil, el que menos contamina es el que está ya fabricado!

Y la otra gran pregunta que siempre me hacéis: ¿realmente lo que haga una persona importa tanto? Os lo contamos aquí

… antes de irme de este post! Aquí tenéis la gráfica del día de rebasamiento de las últimas cinco décadas... esto quiere decir que en 1970 todos los habitantes del planeta gastaban en un año los bienes y servicios ecosistémicos (agua, aire limpio, capacidad de regulación del clima…) que La Tierra es capaz de regenerar en un año.

Hoy nos gastamos todo este “presupuesto ambiental” en julio. Quiere decir que llevamos cuatro décadas con una deuda acumulada que necesitamos REGENERAR. Ya no es suficiente con ser sostenibles, por eso existe WAKAYA y su misión de regenerar la naturaleza a través de distintos mecanismos.